Fue un obseso. un obseso de su misión, obseso de su éxtasis. Fue un idealista que desecho la realidad tal como es y concibió una realidad distinta, más elevada que correspondía a su intuición.
fue una concepción política; la que servía de la forma para manifestar sus ideas y su ideología
Siqueiros fue un luchador. Siqueiros no fue un teórico de la estética. Fue un pintor, un gran pintor. Como artista que fue creo su forma, la forma expresiva que correspondía a su temperamento romántico indómito.
José David Alfaro Siqueiros, fue producto del movimiento renovador de la Revolución Mexicana participando siempre en la lucha como líder social y como artista obrero calificado.
Nació el 29 de Diciembre de 1896, en Santa Rosalía, hoy Camargo estado de Chihuahua.
A los dos años se quedo huérfano de madre y cae bajo la educación disciplinaria de sus abuelos paternos: el guerrillero michoacano de la época jurista Antonio Siqueiros de recio carácter, apodado "Siete filos"y Eusebia Palomino, mujer de mano suave.
Resuelve ingresar como alumno a la Escuela de Bellas Artes, denominada desde los tiempos de la colonia "Academia de San Carlos"
Mientras estudiaba en la academia de San Carlos, México, por primera ves una huelga de estudiantes en la cual Siqueiros participa. De la "conspiración estudiantil"como le llamaba Siqueiros.
Alfaro recorre el país y participa en numerosas acciones militares; en 1917 llega a guadalajara con el puesto de capitán segundo retirado.
Con toda seguridad es el autorretrato más extraño que se ha pintado. La primera impresión ante el cuadro de Siqueiros es:el retrato de un boxeador, listo para la lucha, en el momento cuando se apresta a derribar a un adversario ficticio. Un hombre violento, arrojado, soberbio, convencido, en extremo de su propio valor.
1 comentario:
Gracias por tu publicación en el blog.
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